Esto ha sido controversial a través de los siglos. La gran confesión de Pedro fue: “Tu eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente”. Hasta aquí todo bien entre los católicos y no católicos. Todos creemos que Jesús es el Hijo de Dios.
La respuesta de Jesús resaltó la importancia de la confesión de Pedro: “Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos”. A partir de aquí comienza el problema y basado en esto:
1) La Iglesia Católica Romana está edificada sobre Pedro y es la única “iglesia verdadera” fundada por Jesucristo. 2) Pedro fue el primer obispo de Roma. 3) Pedro legó las llaves del Reino a sus sucesores. ¿Podemos aceptar esta interpretación?
Veamos algunas evidencias del Nuevo Testamento sobre la iglesia primitiva de Cristo y la Iglesia Católica Romana: en el pasaje cuando se refiere a Pedro es en segunda persona (tú), pero esta “roca” está en tercera persona. Pedro (petros) es masculino singular y “roca” (petras) es femenino singular. Es cierto que a Pedro se le llamó piedra, pero esto es irrelevante, pues el mismo Pedro a todos los creyentes nos dice lo mismo: “Vosotros también, como “piedras vivas”, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo” (1ª Pedro 2: 5).
Cuando se habla de la fundación, Cristo es llamado la piedra en la que está edificada. La “iglesia verdadera”, según la definición bíblica está edificada en Jesucristo: “…edificados sobre el fundamento de los apóstoles y profetas, siendo la principal piedra del ángulo Jesucristo mismo (Efesios 2:20) Es muy claro: todos los apóstoles y no solamente Pedro, son fundamentos de la iglesia, y el único que tiene un lugar prominente y único es Jesucristo, y al resto de los creyentes como “piedras vivas” en la superestructura de la iglesia.
“Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo (1ª Corintios 3:11). Esta piedra, que es Cristo, es la misma puesta en Sion, es la misma de la que habla Pedro en su 1ª carta 2:4-8, es la misma de la que habla Jesús en Mateo 16:18. No solo los evangélicos, sino muchos padres de la iglesia, enseñaron que la “roca” de la que Jesús hablaba era la confesión de Pedro. Y Jesús respondió: “…sobre esta roca edificaré mi iglesia”. ¿Qué roca? Esta confesión de fe.
Es decir, “todos los que me confiesen, serán mi iglesia. A Pedro no se le confirió una autoridad especial. Esta misma autoridad y responsabilidad que Jesús le dio a Pedro, se las dio a los otros discípulos: “De cierto os digo, que todo lo que atéis en la tierra, será atado en el cielo; y todo lo que desatéis en la tierra, será desatado en el cielo” (Mateo 18:18). Aquí, a diferencia de Mateo 16:19, los verbos atéis y desatéis están en plural, dirigidos a todos los discípulos.
La Biblia enseña que la “verdadera iglesia” no es una institución u organización humana. La “verdadera iglesia” es el cuerpo de todos los creyentes, los cuales a través de la fe tienen una relación íntima con Cristo, donde Él es su cabeza y el centro de toda adoración y culto. Toda persona católica o no católica romana, evangélica, protestante, mahometano, budista, incrédulo, etc., puede ser miembro de la “verdadera iglesia” de Jesucristo a través de la fe en Él.
Hay todo un debate sobre si "la roca" sobre la que Cristo edificaría Su iglesia
es Pedro, o la confesión de Pedro de que Jesús es "el Cristo, el Hijo del Dios Viviente" (Mateo 16:16). Honestamente, no hay manera de estar absolutamente seguros de cuál visión es la correcta.
La construcción gramatical permite las dos opciones.
La primera visión es que Jesús estaba declarando que Pedro sería la "roca" sobre
la que edificaría Su iglesia. Jesús parece estar utilizando un juego de palabras. “Tú eres Pedro (petros) y sobre esta roca (petra) edificaré mi iglesia.” Debido a que el nombre Pedro significa
"roca," y Jesús va a edificar Su iglesia sobre una roca – pareciera que Cristo está uniendo las dos palabras. Dios utilizó grandemente a Pedro en la fundación de la iglesia. Pedro fue el primero
que proclamó el evangelio en el día de Pentecostés (Hechos 2:14-47). Pedro también estuvo presente cuando los samaritanos recibieron el Espíritu Santo por
primera vez (Hechos 8:14-17), y fue el primero en llevar el evangelio a los gentiles (Hechos 10:1-48). En un sentido, Pedro fue la "base" de piedra de la iglesia.
La otra interpretación popular de la roca es que Jesús no se estaba refiriendo a
Pedro, sino a la declaración de fe de Pedro en el verso 16: 'Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios Viviente.' Jesús nunca les había declarado explícitamente la totalidad de Su identidad a Pedro ni
a los otros discípulos, y reconoció que Dios soberanamente le había abierto los ojos a Pedro y le había revelado quién era realmente Jesús. Su confesión de Jesús como el Hijo de Dios brotó de él,
una declaración sincera de la fe personal de Pedro en Cristo. Esta fe personal en Cristo es el sello del cristiano verdadero. Todos los que han colocado su fe en Cristo, como lo hizo Pedro, son
la iglesia. Pedro expresa esta verdad en 1 Pedro
2:4: "Acercándonos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres,
más para Dios escogida y preciosa, vosotros también, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio
de Jesucristo."
Después de la confesión de Pedro, Jesús declaró que Dios le había revelado la
verdad a Pedro. La palabra "Pedro," Petros, significa "pequeña piedra" (cf. Juan 1:42). Jesús luego utilizó una palabra relacionada, petra, que significa "peñasco base." La
misma palabra es utilizada en Mateo
7:24, 25 cuando Jesús describe la roca sobre la que el hombre sabio edificó su casa. Pedro
mismo utiliza la misma ilustración en su primera epístola: La iglesia está constituida por numerosas piedras pequeñas, "piedras vivas" (1 Pedro 2:5), que comparten la confesión de Pedro de que Jesús es el Cristo, el Hijo del Dios viviente.
Esas declaraciones de fe constituyen el fundamento de la iglesia.
Además, el Nuevo Testamento deja perfectamente claro que Cristo es el fundamento
de la iglesia (Hechos 4:11, 12; 1 Corintios 3:11). Es un error pensar que Jesús le dio este privilegio a Pedro. En un sentido, todos los
apóstoles jugaron un papel fundamental en la edificación de la iglesia (Efesios 2:20), pero la posición de primacía está reservada sólo para Cristo. Cristo es llamado "la
principal piedra angular" (1 Pedro 2:6, 7; Efesios 2:20; Lucas 20:17; Hechos 4:11). Si Cristo es la piedra angular, ¿cómo podría ser Pedro la piedra sobre la que es
edificada la iglesia?
Por lo tanto, las palabras de Jesús en Mateo 16:18 se interpretan mejor como un simple juego de palabras. Parafraseando, "Pedro, te
llamas "pequeña piedra," pero de tu boca ha salido una verdad como un peñasco que será la base de la iglesia."
La iglesia católica romana alega que Pedro es la roca a la que Jesús se refería,
y luego utiliza esa interpretación como evidencia de que es la iglesia verdadera. Pero, como hemos visto, la interpretación de Pedro como la roca no es la única interpretación válida. Incluso si
Pedro fuera la roca en Mateo16:18, eso no le daría ninguna autoridad a la iglesia católica romana. Las Escrituras no
registran en ningún sitio a Pedro en Roma. Las Escrituras nunca describen a Pedro con autoridad sobre los otros apóstoles o como el principal líder de la iglesia primitiva. Pedro no fue el primer
Papa. El origen de la Iglesia Católica no está basado en las enseñanzas de Pedro ni de ningún otro apóstol.
MI NOMBRE ES MANOLO, Y SOY UNO DE LOS HIJOS DE DIOS.NO QUIERE DECIR QUE YO YA SEA PERFECTO, NI QUE SEA MEJOR QUE NADIE, SI NO, QUE...MI PADRE CELESTIAL ES DIOS, E INTENTO HACER LAS COSAS CONFORME A EL LE AGRADE. HE RECONOCIDO A Yesuha (Jesus) COMO MI SEÑOR Y SALVADOR. PERO SE QUE AUN QUEDA CAMINO POR RECORRER Y QUE AUN NO HE ALCANZADO LA META. LA CARRERA ES DURA Y LARGA, PERO CON LA PRESENCIA Y COMPAÑIA DE DIOS, ES UNA BATALLA VICTORIOSA, PORQUE ASI LO HA PROMETIDO DIOS. Y NO DUDO EN EL NI EN SU PALABRA Y TENGO LA FE DE QUE SOY SALVO POR SU GRACIA.
ASIE QUE, SI TU AUN NO HAS DADO ESE PASO DE FE, TE INVITO A QUE LO DES, NO QUEDARAS DEFRAUDADO/A, Y SI AUN NO HAS CONOCIDO LA VERDAD Y NO ERES CREYENTE, ANIMO, ACERCATE AL SEÑOR Y DEJA QUE EL SEA QUIEN SE PRESENTE Y ENTRE EN TU CORAZON.
NO DEJES PASAR ESTA UNICA OPORTUNIDAD. JESUCRISTO EL SEÑOR TE ESTA ESPERANDO.
SI AMI ME HA PERDONADO, A TI TAMBIEN TE PERDONA SI TU QUIERES.
NO BUSQUEMOS EN LAS PALABRAS DE LOS HOMBRES, LO QUE LA PALABRA DE DIOS NO DICE.
TENGAMOS CUIDADO A QUIENES ESCUCHAMOS. PORQUE...ESCRITO ESTA...QUE VENDRAN ENGAÑADORES Y DISFRZARAN DE MENTIRAS LA PALABRA DE DIOS.